El hecho que las minorías que dirigen Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos y otras naciones árabes actúen guiadas por una doble moral (parte del reclamo original de Osama bin Laden a sus parientes en Arabia Saudí) ha alentado también, ya desde los setenta, movimientos como el que se hizo del control de Irán luego de derrocar a la familia Reza Pahlevi, títere a su vez de los intereses británicos y estadounidenses.
No sólo eso, es necesario tomar en consideración los efectos perversos de la invasión soviética de Afganistán en la década de los setenta. Por una parte, los soviéticos representaban, desde la lógica del Islam, la versión más radical y secularizada del "Occidente". Los abusos perpetrados por Stalin en algunas de las naciones anexadas a la Unión Soviética (Kazajastán, Kirguiztán, etc.), hacían prever una situación similar para el futuro de Afganistán. Sin embargo, una coalición de fundamentalistas islámicos entre los que destacaba Osama bin Laden y operativos de la CIA, hicieron de Afganistán una pesadilla para las fuerzas armadas soviéticas y garantizaron la sobrevivencia y financiamiento de distintos grupos vinculados en mayor o menor medida a Bin Laden. Éste, a su vez, desarrolló otras estrategias de financiamiento en el así llamado Triángulo de Oro, el área de Afganistán en la que se producen las mayores cantidades de opio para el consumo europeo.
Creo que querer entender el efecto de las imágenes de Westergaard al margen de este contexto complejo es sumamente difícil, díría yo que imposible.
Monday, February 13, 2006
The Context of the Cartoons
Rodolfo at México desde fuera has an interesting take on the Muhammad cartoon controversy, considering it in the wider context of Al Qaeda, the military occupation of Iraq and Afghanistan, and the important but rarely-discussed aspects of the later Cold War era in which these phenomena have their historical roots:
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment